lunes, 21 de mayo de 2012

El caso de las garras de terciopelo




Sin querer me encontré con la que según entiendo fue la primera película basada en alguna de las novelas de Gardner protagonizada por mi querido Perry Mason.

Apenas ver esa presentación con esos actores tan ... tan... tan.... bueno, creo que la veré aguantándome la risa en más de una parte y quejándome en el resto por el poco apego al libro... en fin, es por ello que tengo tan mala relación con la serie de tv, esas historias retocadas sobre algunos de los títulos que fueron publicados alguna vez... la eterna discusión sobre el 'romance' y la caricaturizacón gratuita de algunos personajes... uuf, parece que todo es mínimo ante el final de esta película (recuerdo que en algún sitio leí que acababa en ........).
Aún pienso en la versión que está preparando R. Downey Jr, leí en algún sitio que el guionista podría ser el mismo de 'Linterna verde' y siento que estoy aún más asustada que cuando leí sobre el proyecto el año pasado.

Por mientras, me acablo de re-leer "El caso del sonámbulo" y me olvido del tema fílmico hasta que el monstruo esté desatado y no haya más remedio que soportar el golpe. Es lo que hay :/

EDITO: primero, que cosa más extraña la carga directa desde Youtube.... segundo, Crom, Perry Mason si estaba pasadito de los 40, pero no entrando en los 60!!! D:

La guitarra y el 'privilegio'



Pollito tiene 6 años. Pollito disfruta de jugar con autos de juguete, cocinar con masas 'no tóxicas' y a crear aventuras con los muñequitos L. People; le gusta también la música , las imágenes ‘lindas’y que  le  lean cuentos e historias, cosas sobre viajes, sobre la vida de algún personaje que le parezca ‘interesante’…
Hemos procurado entregarle algo más que ‘monitos animados’… claro, los fines de semana ve algo de tv como cualquier niño, también juega un rato con la DS, pero su vida no gira en torno a ello.
Cuando llegó el momento de decidirse por un colegio para su etapa ‘escolar’ sabíamos que sería un problema lidiar con estos conceptos tan usados como ‘excelencia académica’, ‘buen Simce’, ‘Puntajes nacionales’ y todo lo que alude a la nueva religión que es el ‘exitismo’ desde las más tiernas edades. Pero dicen que al mal paso es mejor darle prisa y acabamos matriculando a la criatura en un buen y renombrado científico-humanista del que ya sabíamos ‘algo’. “Cuando menos tendrá la posibilidad de explorar más materias que en otros coles y así poder ir viendo hacia donde se perfilan mejor sus intereses por si mismo’, nos dijimos con gordi (aka esposo).
Durante el año pasado en kinder tuvo varias horas de música y de gimnasia a la semana. La vida parecía ser buena.
El problema es que llegó este año, con ello el 1º básico, y despertamos del sueño del sucio hippie humanista que cree en la importancia de la exploración artística de un niño.
Que no, que no se hace música hasta 4º básico. Que sólo hay dos horas pedagógicas de Historia, que Gimnasia se hace en teoría 2 veces por semana, pero si la profesora jefe estima que hay algo pendiente de una materia más ‘importante’ como lo es matemáticas e inglés, pues adiós Gimnasia!
El daño ya estaba hecho.

-¿Pero no es este acaso un colegio científico-humanista?
-Lo que sucede es que hay nuevas reformas educacionales en nuestro país.
-Ya lo sé, se ha quitado la obligatoriedad a muchas materias y existe la posibilidad de reducir las horas de otras más, pero insisto, no es acaso este un colegio científico-humanista? ¿Por qué sólo priorizan matemáticas e inglés? Música y artes son igualmente importantes en el desarrollo de los niños.
-Pero las reformas….
-No son una imposición, se da la opción a cada establecimiento, pero no implica que sea imperante que saquen las materias. Salí de este establecimiento hace 11 años al igual que mi esposo y optamos por traer a nuestro hijo porque ‘era’ científico-humanista, no por los puntajes nacionales. De hecho, fui una pésima alumna, nunca destaque en nada, pero me parecía un buen colegio.
-…………

Entonces, vimos que nada sacábamos con darnos de cabezasos  contra la pared, y le preguntamos al polluelo si quería aprender a tocar un instrumento musical.
En seguida dijo que primero guitarra, y después otros.
Llenos de felicidad buscamos guitarras tradicionales pequeñas.
Lo siguiente fue buscar a un profesor… porque las ganas ya estaban confirmadas.

Ya estamos  a más de la mitad de Mayo y aún escucho a personas con niños del mismo colegio que el nuestro y de otros quejándose de que no se les hace música , arte o histria.Y entonces llegamos al penoso punto en que nos damos cuenta que poder comprar una guitarra y pagar clases se convierte en un privilegio al que no todos pueden acceder.

En verdad nunca me imaginé el futuro tan triste. La música, para los niños, es un privilegio.

Yo pensaba en el holocausto zombie como el peor de los males meditando sobre el ‘futuro’ hace unos 10 años … esto es nuevo para mi, es una forma de terror más escabrosa, más siniestra y más cruel: privar a los futuros adultos de la posibilidad de tener más conocimientos que los necesarios para poder ser jefes o empleados sin más opción en la vida.
Esta película de terror parece que tiene para largo.
Y se veía tan apocalíptico en algunas películas clase B de los ochenta que los llamados ‘privilegios’ en un futuro no muy lejanos serían cosas tan vitales como el agua o una simple fruta.
Ja.
Estuvo buena la broma.



PD: y no, no es un costo demoledor pagar las clases... es sólo un tema de prioridades... una lástima.

jueves, 17 de mayo de 2012

Tesorito del '22


























Alrededor del Mundo, Apartado 216, oficinas y talleres: Martín de los Heros, 65; teléfono: j-939
Año XXIV; Madrid, 9 de Enero de 1922. Núm. 1.177

Estaba un día de excursión con mi buena amiga la srta. R (yo soy la sra. R, ajajajaj) cuando pasamos cerca de un sitio de venta de libros usados  y la arrastré hasta allí para que me ayudara a buscar un libro de W. Faulkner que ando tratando de atrapar (creo que incluso si fuese un Pokemon sería más sencillo) cuando luego de pasar por muchos títulos modernísimos sobre computación en la década de 1980, novelitas rosas, cosas religiosoides, enciclopedias con nuestro terruño con 12 regiones aún y un laargo etcétera, dí con esta preciosidad: Alrededor del Mundo.
Ya llevaba un título impreso en pulpa de la colección biblioteca Oro de la Editorial Molino cuando encontré esta revista, por lo que poco me importó que la dependienta me hablara de más números y otros de 'Don Fausto'.
Espero las fotos tengan la calidad suficiente para que se puedan apreciar bien las gráficas y artículos.
Pretendo ir en los próximos días a buscar más 'Alrededor del Mundo'.
Y cuando las tenga conmigo, aparecerán por acá!!

miércoles, 2 de mayo de 2012

Agatha

Ultimamente he estado más ávida que nunca de alimento pulpesco. Me he leído y re-leído muchas páginas desde marzo. Entre los elegidos estaba Agatha.
Así que empecé a recordar y recordar.... cuando tenía unos 14 me pillé algunos libros, lejos el que más me gustó fue El misterio de Pale Horse; entre medio, me ví muuuchos de los telefilmes de Poirot de finales de los 80, y me parecieron encantadores.
Hace un tiempo comenzaron a pasarlas por Film & Arts (Crom bendiga ese canal) y me puse a la caza de novelas de Poirot, el famoso detective belga con cabeza de huevo con el ego del tamaño del Sol creado por la buena A. Christie.
Partí con 'Tragedia en tres actos'.
Ente medio de su lectura me leí varias cosas, cuentos policiales de mis revistas de los años '30, cuentos de S. Holmes, etc.... imposible interesarme en el final. Me aburrió terriblemente.
Ahora comencé con esta bonita edición de 'Un gato en el palomar' (ed. Molino, Biblioteca Oro) y desgraciadamente siento que voy por el mismo camino. 
No sé si mi capacidad de asombro disminuye, o mi apatía y capacidad crítica crecen.

Esta tarde me re-leí por vez nº50 apróx. el cuento "Puro melodrama" de E. Wallace y su buen hijo Mr. Reeder.
Creo que cada día me ajusto más y más a eso de que perro viejo no aprende trucos nuevos.

Si no logro nada positivo con 'Un gato...' me releeré otro título de cabecera y luego revisaré la lista de pendientes para ver si doy con algo digno de recordarse por muchos años.