sábado, 6 de abril de 2019

...es que me ganaba la pereza...

¡Saludos, terrícolas!
Después de una barbaridad de meses evitando recordar que esta bitácora de blogerlandia existía, regreso por un momento, hasta que vuelva a caer en el olvido... que estoy segura ocurrirá nuevamente!! estoy vieja y me canso mucho incluso de escribir unas sandeces en internet. O de pensar en la redacción de dicha sandeces... o todo junto.

Para variar partimos este año con un buen y clásico terremoto en la comarca... sin mentir ahora mismo tiembla, jajajajaja, esto ya es tragicómico. A diferencia del terremoto de hace un par de años se cayeron muchas cosas en casa, una nave de Star Wars que estaba en lo alto de un mueble logró volar varios metros, se quebraron muchas piezas de vidrio y loza de la cocina y por primera vez los gatos sintieron pánico en su totalidad. Los cuatro reaccionaron muy atemorizados, y una en particular quedó con semanas aterrorizada a cada réplica, vomitaba al mínimo temblor... por fortuna ya lo ha superado y ahora ni siquiera se levantan ante los constantes movimientos.

La joven Ojos, un ejemplo de superación al estrés post traumático
Además de los reiterados movimientos telúricos a los que al fin se acostumbra nuestro retoño pre adolescente, he tenido la oportunidad de ir a muchos eventos, muy lindos, entretenidos y concurridos en su mayoría. El trabajo no ha faltado por eso lado.
Y dentro de ese apartado, debo predicar la palabra de MingYun... the ultimate copic chino!!
Lo más hermoso es que se pueden combinar maravillosamente entre si
Sé que Copic es el nombre de la marca probablemente más famosa de marcadores con base de alcohol y sea incorrecto referirse a estas bonitas (y baratas) alternativas chinas, pero no puedo evitar devaluar mi propia inversión con el apelativo que he decidio usar. 
Pero al margen de la ironía debo decir que amo con buena parte de mi corazón a estos lapicitos. Se trabaja realmente rápido y eso aumento mi productividad en MUCHO.

Y eso es todo por esta vez. Debo hacer una entrada de los libros que he acumulado sin poder leer porque me falta tiempo.
La vida es bella.

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